Cleveland
Un estudio de Cleveland Clinic muestra que la cirugía bariátrica realizada en pacientes con obesidad y apnea obstructiva del sueño de moderada a grave se asocia con un riesgo significativamente menor de muerte y eventos cardiovasculares adversos graves, en comparación con los pacientes que no se sometieron a la cirugía. Este estudio fue publicado en el Journal of the American College of Cardiology
El doctor Ali Aminian, director del Instituto Bariátrico y Metabólico de Cleveland Clinic e investigador principal del estudio MOSAIC, dijo: «La investigación muestra que la pérdida de peso lograda con la cirugía bariátrica se asocia significativamente con un riesgo un 42% menor de eventos cardiovasculares adversos graves y un riesgo 37% menor de muerte en pacientes con obesidad y apnea obstructiva del sueño de moderada a grave».
Según un estudio publicado en The Lancet Respiratory Medicine, casi 1.000 millones de adultos en todo el mundo tienen apnea obstructiva del sueño. Uno de los factores de riesgo más comunes para desarrollar el trastorno del sueño es la obesidad. La Asociación de Medicina de la Obesidad informa que alrededor del 70% de los pacientes adultos con apnea obstructiva del sueño tienen obesidad.
Los pacientes con apnea obstructiva del sueño que puede alterar el metabolismo y causar más aumento de peso, tienen un mayor riesgo de desarrollar afecciones potencialmente mortales, como ataque cardíaco e insuficiencia cardíaca.
La investigación MOSAIC (Metabolic surgery for OSA and Incident Cardiovascular disease) dirigida por Cleveland Clinic es la primera de su tipo en reportar datos sobre los resultados cardiovasculares a largo plazo de la cirugía bariátrica en pacientes con apnea obstructiva del sueño y obesidad.
El estudio observacional incluyó a 13.657 pacientes adultos con un índice de masa corporal entre 35 y 70 y la presencia de apnea obstructiva del sueño de moderada a grave (diagnosticada mediante una prueba de estudio del sueño) entre 2004 y 2018.
Las características clínicas basales de 970 pacientes que se sometieron a cirugía bariátrica se equilibraron con las de 12.687 pacientes en el grupo de control no quirúrgico utilizando métodos de ponderación por superposición. El seguimiento finalizó en septiembre de 2022.
Al final del período de estudio, los resultados muestran que la incidencia acumulada de eventos cardiovasculares adversos mayores a los 10 años fue del 27% en el grupo de cirugía bariátrica y del 35,6% en el grupo no quirúrgico.